20081022

mélancolie...



Voy sobre un camino que no se por donde me dirige, simplemente veo una luz al fondo y me desespero y empiezo a correr. De pronto me detengo para voltear a mi alrededor a ver si logro distinguir las imágenes que pasan a contra luz frente a mi cara, pareciera como si miles de fotografías revolotearan a mi alrededor como cientos de mariposas. Empiezo a sonreír viendo algunas de estas y todo empieza a volverse claro. Al tomar una de estas me ubica en tiempo y espacio en un apartamento, veo una cocina donde se esta preparando una deliciosa cena, hasta puedo percibir cada ingrediente por tan delicioso aroma que sale, al voltear y ver un reflejo en la ventana, veo que soy yo aquel que esta cocinando; pero al voltear a mi alrededor me encuentro solo con mi reflejo; de pronto todo se desploma y de nuevo solo me encuentro, solo, con esa foto de un recuerdo que había tomado y empiezo a sentir como empiezan a caer precipitadas unas lagrimas que al levantar la mirada lo único que veo es el recuerdo; aquel ayer en donde me encontraba en el nido donde crecí… recuerdo aquellos caminos rumbo al colegio donde me llevaba mi madre en un “vocho” gris, mientras cantábamos felices al unísono sin importarnos mas nada… Recién cumplí 25 y mientras mas fotos aparecen a mi alrededor mas vacío me siento, mas recuerdos tengo, pero menos alegrías se reflejan; siento que cada vez me encuentro mas lejos de aquello que me hacia tan feliz y se llamaba inocencia, cuando simplemente le podía sonreír a todo aquello que pasaba frente a mi. Hoy siento que no tengo más que esta lágrima de rabia hacia todos esos momentos que conforme va pasando el tiempo, cada una de estas imágenes se quema al tocarlas, y ¿por que?... Porque tengo que voltear hoy en día y dudar si lo que hago esta bien!? Siento una impotencia tan grande de estar disfrutando un momento grato y al verme al espejo no puedo verme disfrutándolo, veo únicamente aquello que deje atrás. Cada vez me cuesta mas trabajo regalar una sonrisa o incluso mostrar la dulzura que alguna vez logre darme cuenta que podía ofrecer, a veces siento que mi frialdad se ha tornado en un corazón que cada vez se envenena con un coraje que conforme pasa el tiempo sigue creciendo, sigue creciendo y sigue siendo el motor de que siga corriendo, sin importarme que tan lejos llegue; cada vez se hace mas fuerte la necesidad de brillar, así es, ya se ha vuelto una necesidad y conseguir el éxito a como de lugar, a ser el mejor en lo que hago, a volverme una mejor persona, a simplemente ser mejor que de lo que alguna vez pensé en llegar a ser… simplemente siento que es una competencia personal y tengo que ser mejor que tu! Crecí sin conocerte, solo tengo hermosos recuerdos con mi madre, la mejor persona del mundo en lo personal y de mi abuelo que llego a convertirse en mi ejemplo a seguir, pero en donde estas tu!?... donde!? Hace poco te conocí, sabia que existías porque te veía, solo que siempre estabas lejos, muy lejos de mi y nunca te importo acercarte, incluso pienso que te valía madres En realidad ahora ese el sentimiento que tengo hacia ti… un día me doy cuenta que estoy en la universidad con mis amigos y al salir de casa para ir a la fiesta de uno de ellos me detienes y me pones hora de llegada, no me jodas, no es la hora… mas bien ya no es el momento. Cada vez pierdo mas el interés de conocerte, incluso creo que es mejor el recuerdo que tengo de cómo eras; ya que ahora al ver quien eres y como te comportas simplemente no me agrada en lo mas mínimo. Déjame en paz! Por mas que trato de luchar, me sigue atormentando tu sombra, lo peor es que como dicen me encuentro en la edad de que lo que yo hago o lo que decido es lo que importa, no se que pase el día que llegue a decir “el viejo tenia razón”… en realidad tu no eres mi viejo, y no se si llegues a serlo… simplemente porque ya he llegado a decirlo y ese viejo es mi adoración, mi abuelo. Si algún día te hubieras dado cuenta de lo valioso que podía ser el decir palabras mágicas como “te quiero” o aun mejor “bien hecho” o que tal un “yo te apoyo” no estarían escribiendo pendejadas como esta y simplemente podría tener todo el orgullo del mundo de ser tu hijo… Reventando en llanto me doy cuenta que el camino que he tomado ha sido el mejor… Al final ese corazón frío, es lo mas blando y frágil de mi ser y por mas “fuerte” que quiera ser, creo que habrá momentos como este de reventar en un llanto para desahogar todo ese coraje que por años te he tenido… De cualquier manera… juro que me encantaría abrazarte, besarte y al verte a los ojos decirte que te quiero, de verdad, espero que ese día llegue pronto, ojala y pronto te despejes de esa nube de falsas creencias e ilusos pensamientos y te des cuenta de la mujer tan increíble que tienes a tu lado y lo que ha hecho mantener a la familia, de cierta forma unida… y cuando te des cuenta que tienes un hijo, simplemente sonríe y si quieres decir algo… espero sea grato escucharlo.

20080127

empece a caminar

Caminando sobre el largo camino que me tocaba recorrer deje de ver el camino y comencé a ver esas imágenes de las cuales se formaban mis recuerdos. Hacia tiempo que no me regalaba mí propio tiempo, sin salirme del camino simplemente me detuve, cerré los ojos y tome un profundo respiro. Volteando a mi alrededor vi un árbol grande y robusto, lleno de ramas y con una raíz enorme, me quede viendo fijamente al árbol ya que pocas veces uno se encuentra con esas cosas que lo pueden llegar a sorprender, camine hacia el y lentamente dirigí mi mano hacia el tronco, justo antes de colocar por completo mi mano sobre él, el viento soplo hacia mi, varias voces pasaron por mi cabeza como si me estuvieran rodeando mil voces por todo mi ser, cerré los ojos para concentrarme de lo que estaba pasando y apoye mi mano sobre el tronco para recargarme, aquel desierto por donde iba caminando de pronto se transformo en un bosque, al momento de abrir los ojos, aquel árbol grande y viejo que había visto había revivido por completo, se sentía lleno de vida, estaba frondoso y colorido, lleno de frutos que ni siquiera podría nombrarlos ya que se veía fantásticos.

Pase mi mano por mi cabello para despejar mi cara y aquel camino desértico que atravesaba se había transformado en un camino lleno de rutas y opciones, que al final sin importar la que tomara tendrían algún destino. Antes de retomar mi camino volví a aquel árbol donde me encontraba y recargando la espalda, doblando las piernas empecé a resbalar hasta que me encontré sentado a los pies del árbol abrigado por la sombra que me proveía, cerré los ojos y una música desconocida empezó a nacer, aquellas voces que había aparecido momentos atrás se volvieron a manifestar con cantos, comenzaron a sonar el cantar de las aves, las pisadas de animales… de pronto ya no me encontraba solo, al contrario ya formaba parte de esa vida y dibujando una sonrisa en mi rostro cerré los ojos para poder guardar ese momento dentro de mi.



Al abrir los ojos me encontraba en un lugar donde ya había estado antes, un lugar que conocía pero era diferente, tenía esa sensación ese aroma. Había regresado a mi infancia, de pronto escuche esa voz que me hacia sonreír cada que la escuchaba, rápidamente volteo para ver si en verdad era el, estaba frente a mi d nuevo, otra vez lo podía ver, pero en vez de hacer cualquier cosa me quede inmóvil no pude hacer ni decir nada, simplemente mis ojos se empezaron a humedecer, y mi cuerpo empezó a temblar, de nuevo estaba frente a mi abuelo. Se me quedo viendo como solía hacerlo, ligeramente sonriendo y de pronto rápidamente sentí como si alguien pasara corriendo y me atravesara, esa pequeña persona que iba corriendo hacia el era yo en mi niñez, sentía como se me quebraba el corazón de extrañarlo, de volver a verlo después de todo este tiempo y tener un recuerdo intacto de el, a tal grado que volvía a sentir su aroma acariciar mi nariz, al momento de llevar mi mano hacia mis ojos para poder limpiármelos ya no estaba, de nuevo me encontraba en aquel bosque donde todo había empezado, rápidamente me puse de pie y con todas mis fuerzas grite su nombre PAPOOO!!! Mi cuerpo se derrumbo y caí sobre mis rodillas y apoyando los puños sobre la tierra mi cabeza agachada y mis ojos sin parar de llorar.

Agotado me recosté sobre mi espalda sobre las hojas que se encontraban en el piso con los brazos extendidos, agotado después de haber revivido ese sentimiento que se encontraba atrapado sobre mi, vi al cielo y estaba claro y despejado, como mi alma en ese momento, sentía una paz que recorría mis venas, y pasaban mil recuerdos frente a mi, escuchaba su sabia voz aconsejándome en cada momento, instruyéndome, enseñándome a diferenciar del bien y el mal, recordando cada uno de todos esos recuerdos inolvidables que me había formado, y siempre al final del día después de haber leído un poco antes de dormir, siempre rezábamos juntos y me enseñaba a dar gracias por el maravilloso día que había podido vivir y de esos momentos que había podido disfrutar, al terminar, me recostaba para arroparme y darme mi beso en la frente; volví a sentir ese beso, volví a sentir el momento y de nuevo mi corazón reventó en un llanto. Era algo que después de todo este tiempo no había podido asimilar su partida, pero lo peor es que no había querido asimilar es que ya había crecido y ahora me tocaba poner en practica toda esa enseñanza que había podido adquirir.

Era el momento de pintar el cielo de estrellas, para tomar una y hacerla brillar. Esa estrella podrá transformar todo aquello que conozco e iluminarlo dibujar cada uno de esos recuerdos felices y volver a encender mi corazón y poder cambiar, poder transformarme es eso que soy y que esta esperando salir. Poniéndome de pie y recogiendo mis recuerdos comencé a caminar; ya no estaba siguiendo mi camino, ahora me encontraba dibujando uno distinto, un camino que solo a mi te toca recorrer, un camino que solo yo podía dibujar.